Seis hombres ataviados con ropa militar se encargan a diario, usando un obsoleto sistema de comunicaciones de la era soviética, de mantener operativo, a pesar de la invasión rusa, el sistema ferroviario de Ucrania, el cual está compuesto por 1.450 estaciones repartidas por todo el territorio de la república y posee una plantilla de 231.000 trabajadores. Estos hombres, que se saben objetivo de los rusos, han renunciado a tener un lugar en el búnker del presidente Zelensky y se juegan la vida a diario. Es una hazaña mantener el ferrocarril funcionando mientras prosigue la brutal invasión de las fuerzas de Putin. La importancia del ferrocarril en Ucrania se ha demostrado vital, entre otras cosas, para la entrada en el país de material humanitario y de primera necesidad.
Más información aquí.
No hay comentarios:
Publicar un comentario