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domingo, 18 de abril de 2021

El Intercity Torre del Oro

El pasado 5 de octubre RENFE cambió el modelo de tren que cubre el trayecto entre Sevilla y Barcelona para, de este modo, recortar el tiempo de viaje entre ambas ciudades. El nuevo modelo, una composición S-121 que se denominará Intercity Torre del Oro y que sustituye al antiguo Talgo, irá por la línea de Alta Velocidad en los tramos Sevilla-Córdoba y Tarragona-Barcelona y el resto del trayecto será por el trazado convencional. De este modo, el tiempo total del viaje queda reducido a 10 horas y 10 minutos.

miércoles, 17 de junio de 2020

Apuntes sobre la fonda de Alcázar de San Juan

Desde hace mucho tiempo, como mínimo un cuarto de siglo, hemos tenido un gran interés por Alcázar de San Juan en general y por la fonda de su estación en particular. Durante muchos años solo tuvimos noticias de ella a través de diversas publicaciones especializadas. Nuestro primer viaje al gran nudo ferroviario tuvo lugar en febrero de 2012 y para nuestra sorpresa, en este caso negativa, la fonda era ya historia. A pesar de no haberla podido conocer en persona, siempre nos ha fascinado todo lo que rodea a este establecimiento que, sin duda, se convirtió en una institución dentro y fuera de Alcázar de San Juan. Por tal motivo, y porque queremos recordar un episodio de nuestro glorioso pasado ferroviario, queremos dedicar en El Guardagujas un espacio a hablar de esta fonda mítica.

El ferrocarril llegó a Alcázar de San Juan en 1858. La llegada de este nuevo tipo de transporte, que había hecho su estreno en la España peninsular diez años antes, iba a cambiar la faz de esta ciudad que algunos consideran patria de Miguel de Cervantes. En aquel año Alcázar de San Juan iba a ser una estación más en la conexión ferroviaria de Madrid con Alicante. Sin embargo, dos años después, esto es en 1860, Alcázar de San Juan vería abierta otra línea que, buscando el sur de España, la uniría con Manzanares. Fue así como empezó la historia de una estación que, con letras mayúsculas, se convirtió en una encrucijada de caminos. La confluencia en Alcázar de San Juan de un tráfico ferroviario tan intenso, nada menos que todas las líneas que unen Madrid con Levante, Badajoz y Andalucía más las líneas transversales, hizo que la estación fuera aumentando sus instalaciones y, de este modo, se creara una fonda que permitiera atender al incesante trasiego de viajeros.

La reina Isabel II, en cuyo reinado nació el ferrocarril en la España peninsular, fue la primera gran visitante de la estación alcazareña en mayo de 1858. De todos modos, la primera gran noticia que existen en los anales de esta fonda, que desgraciadamente hoy se encuentra clausurada aunque ya hablaremos del tema más adelante, es la visita, en 1873, del rey Amadeo de Saboya cuando tuvo que volver a Italia tras su efímero reinado. También hay noticias de las visitas de Alfonso XII, el monarca que dio el título de ciudad a Alcázar de San Juan. También visitó la estación la reina regente María Cristina de Habsburgo-Lorena,  viuda del mencionado Alfonso XII y madre del futuro rey Alfonso XIII.

Fuente: Gaceta de Madrid, 13 de abril de 1877

A finales del siglo XIX la compañía MZA (Madrid a Zaragoza y Alicante), propietaria de la estación de Alcázar de San Juan, disponía de fondas repartidas por toda su red ferroviaria: Sevilla, Córdoba, Espeluy, Baeza, Almorchón, Mérida, Badajoz, Zafra, Murcia, Zaragoza, Casetas, Aranjuez, Madrid Atocha, Ciudad Real y Alcázar de San Juan eran algunos de estos ejemplos. Todas estas estaciones eran, como el lector habrá podido comprobar, importantes nudos de comunicación de la red ferroviaria. En aquel momento las fondas estaban en régimen de arrendamiento y cada arrendatario pagaba una cantidad anual que era calculada por agentes de la empresa ferroviaria en función del tráfico de cada estación. En el caso de la de Alcázar de San Juan, su arrendatario debía pagar 3.500 pesetas al año. Era la segunda por facturación tras la de Córdoba.

Fuente: La Vanguardia, 26 de mayo de 1900. Página 4

Como habrá visto el lector al principio de esta entrada, la fonda de Alcázar de San Juan ofreció un menú especial, cuyo precio ascendía a 1,5 pesetas, con motivo del eclipse total de sol que tuvo lugar el lunes 28 de mayo de 1900. Fueron muchos los que cogieron el tren en Madrid y se acercaron a Alcázar de San Juan para presenciar este fenómeno extraordinario. Por tal motivo, la fonda no quiso quedarse atrás y diseñó un menú compuesto de sopa, un frito, merluza en salsa, pollo a la valenciana con arroz, pan vino y postre.

Fuente: La Vanguardia, 21 de marzo de 1904

El siglo XX empezó también con visitas de personajes ilustres de la política española. Tales fueron los casos de Nicolás Salmerón, Melquiades Álvarez, que para llegar a Alcázar de San Juan usó el "mixto de Valencia" y José Canalejas. A lo largo de la nueva centuria personajes célebres, y no solo de la política, visitaron la fonda: Juanito Valderrama, Sara Montiel, Mario Moreno "Cantinflas", etc...

Fuente: La Vanguardia, 2 de diciembre de 1903

La fonda de la estación de Alcázar de San Juan también fue escenario de bodas. Así tuvo lugar el 28 de febrero de 1906. Según cuentan las crónicas de la época, la celebración fue un gran acontecimiento social y el paseo de la estación fue un hervidero de gente que iba y venía a la fonda. Precisamente hay que subrayar el auge que esta arteria urbana, con sus múltiples establecimientos hoteleros y restaurantes, tuvo durante la época dorada de la estación. La construcción del paso inferior de la estación, que comunica el edificio del paseo con el andén central y que data de la tercera década del siglo pasado, repercutió positivamente en el acceso a la fonda. 

Mosaicos de la antigua fonda de Alcázar de San Juan

La fonda de Alcázar de San Juan no se entiende sin sus famosos azulejos, que podéis ver en la foto anterior, que narran la historia del Ingenioso Hidalgo Don Quijote de La Mancha. Esta colección de azulejos fueron instalados en la fonda en los años 20 del pasado siglo y proceden del taller trianero de Mensaque Rodríguez. Estos azulejos estuvieron inspirados en las ilustraciones que José Jiménez de Aranda realizó con motivo del III centenario de la edición de la primera parte del Quijote en 1905. Esta colección de azulejos es el único recuerdo que nos queda de la antigua fonda.

Tras la Guerra Civil, la estación, y con ella la fonda, pasa a manos de RENFE. La fonda, que llegó a tener 33 empleados en nónima y que estaba abierta las 24 horas del día, no solo se limitó al local que podemos ver en la estación. La venta de productos a los viajeros también se realizaba en el propio andén. Para tal fin se crearon unos carrillos, que disponían de una cesta de mimbre, en los que el vendedor llevaba bocadillos, tortas de Alcázar, chocolatinas, bebidas como la gaseosa local La Prosperidad etc...

Los recuerdos en torno a la fonda son infinitos, algunos de ellos dignos de aparecer en novelas. Los testimonios no solo hablan de los trenes regulares sino también de los extraordinarios como los que transportaban trabajadores para la vendimia en Francia, aficionados que iban a ver un partido de fútbol, militares de maniobras, peregrinos  y enfermos que iban a Lourdes, etc... La fonda también se ocupaba de suministrar víveres, encargados lógicamente por RENFE, a los viajeros que iban en trenes con un retraso importante. 

La fonda de Alcázar de San Juan, de la que desgraciadamente solo nos quedan recuerdos imborrables y los azulejos del Quijote, atesora miles de historias anónimas que darían para interminables libros de vivencias y recuerdos.

Más información

Tesela, número 72. Cuadernos Mínimos. Patronato Municipal de Cultura. Ayuntamiento de Alcázar de San Juan.

sábado, 14 de diciembre de 2019

Campo de Criptana: molinos, ferrocarril y puerta de Levante

Molinos de Campo de Criptana (Ciudad Real). Sábado, 16 de noviembre de 2019
Foto: El Guardagujas.
A veces el silencio no es sinónimo de apatía sino, sencillamente, de complicaciones que surgen en la vida diaria que no nos dejan el tiempo que requerimos para redactar nuestras crónicas y textos. No podíamos dejar pasar más tiempo sin escribir unas líneas sobre una visita que realizamos el pasado sábado 16 de noviembre de 2019 a la localidad manchega de Campo de Criptana. Como todo vosotros sabéis, el día antes citado fue el elegido por la AAFM (Asociación de Amigos del Ferrocarril de Madrid) para organizar el famoso Tren de las Gachas que, saliendo de Madrid Chamartín, tiene como destino Alcázar de San Juan. 

Molinos de Campo de Criptana (Ciudad Real). Sábado, 16 de noviembre de 2019.
Foto: El Guardagujas.
Tras pasear por la querida localidad de Alcázar de San Juan, que en este año hemos visitado por tercer año consecutivo, y degustar las exquisitas gachas que se preparan en la explanada adyacente al Museo Ferroviario, nos desplazamos a Campo de Criptana  Desde hacía tiempo, teníamos una gran curiosidad por visitar esta localidad que dista menos de 10km de Alcázar de San Juan, y que se puede ver a simple vista desde esta última. Campo de Criptana es mundialmente conocida por sus famosos molinos de viento, los cuales podéis ver en las dos fotografías que acompañan esta crónica, y que evocan, qué duda cabe, la famosa aventura de Don Quijote, recogida en el capítulo VIII de la primera parte de la monumental obra publicada en 1605, con esos gigantes que acabó de manera adversa para el hidalgo cervantino. No es la primera vez que podemos ver estas singulares construcciones. Hace nueve años, pudimos visitar los cuatro que existen en Alcázar de San Juan. Además, el pueblo toledano de El Romeral tiene varios molinos de viento que se pueden apreciar desde el tren.

Estación de Campo de Criptana. Sábado, 16 de noviembre de 2019.
Fuente: El Guardagujas.

Era imposible irse de Campo de Criptana sin antes ver su estación de ferrocarril. La última vez que pasamos por este punto de la red ferroviaria fue en julio de 2017 cuando fuimos de Madrid a Valencia Nord en un Talgo convencional vespertino. Queríamos ir por la línea tradicional, la que pasa por Alcázar de San Juan, Albacete y termina en la majestuosa estación de la capital del Turia. La estación de Campo de Criptana permite a los viajeros coger trenes de Media Distancia para desplazarse a Madrid, Ciudad Real, Albacete o Valencia. Por lo demás, la estación no tiene personal que pueda atender a los viajeros. Dispone de una sala de espera y poco más.  A pesar de esto, queremos señalar que Campo de Criptana es, en realidad, la Puerta de Levante porque es la primera estación de la añeja línea que permite al viajero acercarse al Levante español: Murcia y Valencia.

Estación de Campo de Criptana. Sábado 16 de noviembre de 2019.
Fuente: El Guardagujas.

Agradecimientos: El presente reportaje no hubiera sido posible sin la amabilidad, cercanía y hospitalidad de nuestro buen amigo Constantino López Sánchez, responsable de una web informativa que recomendamos desde aquí y un gran ferroviario de Alcázar de San Juan, que siempre nos recibe gratamente cada vez que nos acercamos a su localidad. Muchas gracias por todo.